Del Diplomado Emprendedor a la realidad, un proyecto. Miloslav Gardilcic es fundador de Provegar, conservera que surte de vegetales pre cortados a instituciones y empresas del norte de Chile. “Arica es una ciudad muy especial: tiene de todo”, dice.
Nota escrita para El Morrocotudo.
Todo partió como proyecto del Diplomado de Liderazgo Emprendedor de 2005 para ponerse en marcha desde 2006. Lo que hoy es “Provegar: Vegetales Frescos Pre Cortados”, originalmente iba a ser una empresa de deshidratados, sin embargo, “no era practico, había que competir con China”, dice Miloslav Gardilcic, ariqueño de familia croata, quien vio en el proceso anterior a la deshidratación, el pre cortado, una ventaja que hoy es una necesidad: la alimentación sana en instituciones y empresas.
“Por ejemplo, nosotros entregamos verduras a General Motors Arica, que son 140 personas. Si entregamos un producto contaminado y se enferman 20 personas, se para la planta, porque es el 10% del personal, transformándose aquello en un gasto y pérdida. Es una cuestión de seguridad… en el fondo no vendemos verduras, sino sanitización. Por eso, todo sin preservantes. Ellos tienen que cuidar a su gente, no pueden comprar cualquier cosa”, grafica. Y lo mismo ocurre con el Hospital Juan Noé por completo, y Alicopsa, empresa encargada de la alimentación de colegios en Arica e Iquique. Todos ellos son sus clientes. Hoy Provegar se proyecta en 3 regiones: Tarapacá, Antofagasta y Arica Parinacota, siempre enfocándose en las instituciones, por ello ya están en conversaciones con algunas empresas mineras para surtirlos.
Paso a Peso
Miloslav Gardilcic Harasic (65) es ariqueño, de padre croata y madre alemana. Su familia llegó a Sudámérica a finales del 1800 para establecerse en nuestra ciudad previo paso por la capital Santiago.
“Mi papá se estableció en 1924. La familia se vino de Europa porque allá no había qué hacer. Primero fue la quiebra de la agricultura, porque por una plaga quedó sin suelo. Vivían de una economía agrícola, basada en el aceite de oliva, vinos, ganado. Posteriormente vinieron las guerras. Pueblos chicos de 2 ó 3 mil personas se vieron mermadas. Por esto mi abuelo vendió la vaca que tenía en 150 dólares para que un pariente viniera a Chile, con el compromiso de juntar plata y traer otro hermano, el cual debería hacer lo mismo después con otro familiar. Así es como padres, hijos, tíos, sobrinos llegaron desde isla Brest, croatas, gente joven dura para trabajar. La familia llegaba a una panadería croata en Santiago para trabajar y aprender el idioma. En el caso d ela suya, lo propio en el negocio del comercio, y la agricultura. Todos en la familia son agricultores. Actualmente tenemos hijos ingenieros agrónomos”, relata Milosvav.
Antes exportaba aceitunas, picle y otras cosas desde su predio del valle de Azapa, hasta que un día lo vendió, con empresa incluida, para trabajar y adquirir parcelas en el sur. Pero hace un tiempo volvió. “Arica es una ciudad muy especial: tiene de todo. Es una ciudad pobre, pero con plata. Es un contrasentido, pero es así. Hay de todo: hay lugares preciosos, lugares horribles, sectores que no se han desarrollado, otros en vías de hacerlo”, grafica Gardilcic, quien se asociara con Paz Molina, hoy directora del Colegio Juan Pablo Segundo.
En primer lugar, Provegar se ubicaría en Santa María, donde estaba Mercedes Benz, pero hubo una alerta oportuna del Servicio de Salud antes de firmar contrato con el lugar: de Santa María hacia la playa está contaminado con plomo, cuestión generada por los desechos que se trasladaban desde la bodega de minerales a Bolivia que se ubicaba en el sector. De ahí saltó al Barrio Industrial, en Barros Arana #3017, lugar protegido de este aspecto negativo. Pero esa no fue toda la ayuda del Servicio de Salud para esta empresa de alimentos, también colaboró en el diseño de la planta cada 20% de construcción. “Daban el visto bueno o sugerencias sanitarias para que no llegáramos al final a cambiar lo ya hecho, porque eso es caro”, apunta el ex empresario olivícola. A propósito, no podía dejar de preguntarle sobre si el TLC con Perú estaría haciendo ver negra la situación de mercado a las Aceitunas de Azapa…
Competir con valor agregado
¿Es tan cierto que el TLC con Perú afectará la producción de aceitunas de Azapa?
El problema de nosotros es de otra naturaleza. Lo que perjudica es el volumen. Cuando uno es chico y no puede crecer, tiene que hacer el producto más interesante. Un plus para competir, porque Perú creció. En los ‘60 mi papá exportaba aceitunas a Perú en barriles. Cuando Perú vio que podía hacer lo mismo y el negocio era bueno, cultivaron lo mismo de aquí, con varitas, protegiendo lo suyo de lo de Chile. Así empezaron a crecer y hoy tiene 40 veces lo que nosotros y con eso no se puede competir: tiene costos más bajos, además de subsidios y hay mano de obra más barata. Esta es la historia resumida.
Entonces, ¿qué se puede hacer con la aceituna, un producto símbolo de la zona?
En el valle, todos los olivos están negros por una plaga que no los mata, pero no le permite dar frutos. La mitad del valle ya no da aceitunas. Junto con eso, el mundo cambió. Todo funciona con volúmenes. Ahora se trabaja con una aceituna chiquita y nosotros tenemos la mitad o menos de la producción de hace 30 años atrás. Hay que buscar otro destino: los envasados de vidrio, procesados de otra manera. La Familia Lombardi ha ido incorporando estas cosas.
Pasa que el agricultor tradicional murió, no sólo en Arica, sino a nivel nacional. Él ya no tiene posibilidades de vida, a todo reventar ser un agricultor de subsistencia. Hoy día hay que ser un empresario-agricultor, porque si no maneja un sistema de costos no va a llegar a ninguna parte. Eso de “le pongo el precio al kilo, porque así está en la feria” es un cálculo obsoleto, y en Azapa sigue siendo mayoritariamente así, por lo que se hace bastante difícil salir adelante. Para dar valor agregado, hay que ser empresario, sino no se puede negociar. Todo lo chiquitito ya no tiene posibilidades. Para mejorar hay que hacer muchas cosas. Existen problemas de educación, culturales, económicas y de técnica. Hay que cambiar el modelo, pero cambiarlo es complicado, hay que unirse, porque cada uno por su cuenta no va ha lograr mucho.
Haciendo productiva la Nueva Región
En cuanto a Provegar, ¿ve que puede mejorar el panorama con Arica Parinacota Región?
La verdad de las cosas es que Arica Parinacota Región es un aspecto de organización de tipo política de Estado. Ahora, que la cosa para que salga adelante depende exclusivamente de nosotros. Personalmente, creo que si los ariqueños no se ponen las pilas, esto no llega a ninguna parte. Hay que aprovechar todas estas ventajas que se pueden producir, que no están, hay que formarlas, hay que crearlas. Una de las ventajas, es que la administración va a estar acá, por lo que hay que coordinarse con las autoridades, poniéndonos focos. A todos nos interesa salir adelante, pero todos juntos, pero separados no se llegará a ninguna parte. Debe hacer un interés real, concreto, no sólo “conversemos”. Así le agregamos valor a la agricultura de la región. Hay que tener interés por las buenas prácticas agrícolas, hay que incorporarlas. Ocurre que los clientes quieren saber todo, desde dónde sale hasta cómo se procesa el producto (normas por las que vela el SAG, que da un certificado por su cumplimiento). Al cliente no le interesa el precio, sino la calidad, y así se puede cobrar más.
Todos tienen que tener buenas prácticas agrícolas, sino en 5 ó 10 años más los agricultores de la zona no van a poder vender, y no estoy exagerando. Como lo que pasó con el vino en los ’90: hace 10 años se tomaba en chuica o barril, pero desde hace más de 5 años ahora todo es embotellado. En el área agrícola pasará lo mismo, por eso las empresas están exigiendo buenas prácticas. Justamente por eso en las etiquetas de los productos de supermercados se hacen las referencias al origen y tipo de riego de las verduras, por ejemplo.
De tú a tú
Provegar, cuyos productos llevan el nombre de "Trébol Rojo", administrado por Miloslav, lleva 2 años con este proyecto que partió en cero peso, pero que velando por la calidad, logró certificaciones del Servicio de Salud, el SAG y CORFO, estamento que no subsidia cualquier cosa. Hoy Provegar surte verduras de calidad de la a, a la z: desde acelga a zanahorias, trabajando con agricultores de los valles de Azapa y Lluta. En definitiva, ha tenido éxito en base a ventajas geográficas, productivas y climáticas que supo trabajar y ponerle valor a través de garantizar vegetales sin preservantes, crudos cortados en general en bastones, cubos o rodajas de diferentes medidas. Y todo por observar la tendencia mundial: alimentación sana, y ya.
Desde su visión, ¿qué puede compartir de su experiencia para todos aquellos que quieren emprender en la ciudad?
Ser perseverante. Hay que ponernos las pilas con la nueva región, no estar llorando ni peleando, que el alcalde allá, que el diputado acá, eso no tiene destino. Lo que tiene sentido, sea del color político que sea, es ponerse las pilas y trabajar. Hay que ser más simple. Acá hay cosas por hacer. Los jóvenes tienen que ponerse a pensar. Antes la ideas llegaban del cielo, hoy pueden revisar Internet y ver proyectos que pueden hacerse o adaptarse acá. Por ejemplo, a mi me gustan los champiñones, y averiguando sobre sus variedades concluí que se pueden cultivar acá. Es fácil hacerlo, la estructura es barata. Ventajas: en el sur se hace una temporada, acá se pueden sacar 3. La desventaja: hay que traer el sustrato del sur. Ventaja: los desechos del choclo (que acá se bota) como abono otorgan alto contenido de azúcar al champiñón, el cual sale con mejor sabor y característica. Ves, eso se puede hacer. Costo energía, bajo. Está todo en Internet.
Hay que estar atento…
No estar atento, sino buscar la oportunidad. Hay que generar riqueza, es la labor de los jóvenes. ¿Buscar qué? cualquier cosa. Veamos características. Esta idea (Vegetales Frescos Pre Cortados) la encontré en Internet. Investigué y adapté, viendo la competencia. Hay que tener imaginación y buscar alternativas. De ahí puede salir algún proyecto. Hay que moverse bien.
Nota escrita para El Morrocotudo.
Todo partió como proyecto del Diplomado de Liderazgo Emprendedor de 2005 para ponerse en marcha desde 2006. Lo que hoy es “Provegar: Vegetales Frescos Pre Cortados”, originalmente iba a ser una empresa de deshidratados, sin embargo, “no era practico, había que competir con China”, dice Miloslav Gardilcic, ariqueño de familia croata, quien vio en el proceso anterior a la deshidratación, el pre cortado, una ventaja que hoy es una necesidad: la alimentación sana en instituciones y empresas.
“Por ejemplo, nosotros entregamos verduras a General Motors Arica, que son 140 personas. Si entregamos un producto contaminado y se enferman 20 personas, se para la planta, porque es el 10% del personal, transformándose aquello en un gasto y pérdida. Es una cuestión de seguridad… en el fondo no vendemos verduras, sino sanitización. Por eso, todo sin preservantes. Ellos tienen que cuidar a su gente, no pueden comprar cualquier cosa”, grafica. Y lo mismo ocurre con el Hospital Juan Noé por completo, y Alicopsa, empresa encargada de la alimentación de colegios en Arica e Iquique. Todos ellos son sus clientes. Hoy Provegar se proyecta en 3 regiones: Tarapacá, Antofagasta y Arica Parinacota, siempre enfocándose en las instituciones, por ello ya están en conversaciones con algunas empresas mineras para surtirlos.
Paso a Peso
Miloslav Gardilcic Harasic (65) es ariqueño, de padre croata y madre alemana. Su familia llegó a Sudámérica a finales del 1800 para establecerse en nuestra ciudad previo paso por la capital Santiago.
“Mi papá se estableció en 1924. La familia se vino de Europa porque allá no había qué hacer. Primero fue la quiebra de la agricultura, porque por una plaga quedó sin suelo. Vivían de una economía agrícola, basada en el aceite de oliva, vinos, ganado. Posteriormente vinieron las guerras. Pueblos chicos de 2 ó 3 mil personas se vieron mermadas. Por esto mi abuelo vendió la vaca que tenía en 150 dólares para que un pariente viniera a Chile, con el compromiso de juntar plata y traer otro hermano, el cual debería hacer lo mismo después con otro familiar. Así es como padres, hijos, tíos, sobrinos llegaron desde isla Brest, croatas, gente joven dura para trabajar. La familia llegaba a una panadería croata en Santiago para trabajar y aprender el idioma. En el caso d ela suya, lo propio en el negocio del comercio, y la agricultura. Todos en la familia son agricultores. Actualmente tenemos hijos ingenieros agrónomos”, relata Milosvav.
Antes exportaba aceitunas, picle y otras cosas desde su predio del valle de Azapa, hasta que un día lo vendió, con empresa incluida, para trabajar y adquirir parcelas en el sur. Pero hace un tiempo volvió. “Arica es una ciudad muy especial: tiene de todo. Es una ciudad pobre, pero con plata. Es un contrasentido, pero es así. Hay de todo: hay lugares preciosos, lugares horribles, sectores que no se han desarrollado, otros en vías de hacerlo”, grafica Gardilcic, quien se asociara con Paz Molina, hoy directora del Colegio Juan Pablo Segundo.
En primer lugar, Provegar se ubicaría en Santa María, donde estaba Mercedes Benz, pero hubo una alerta oportuna del Servicio de Salud antes de firmar contrato con el lugar: de Santa María hacia la playa está contaminado con plomo, cuestión generada por los desechos que se trasladaban desde la bodega de minerales a Bolivia que se ubicaba en el sector. De ahí saltó al Barrio Industrial, en Barros Arana #3017, lugar protegido de este aspecto negativo. Pero esa no fue toda la ayuda del Servicio de Salud para esta empresa de alimentos, también colaboró en el diseño de la planta cada 20% de construcción. “Daban el visto bueno o sugerencias sanitarias para que no llegáramos al final a cambiar lo ya hecho, porque eso es caro”, apunta el ex empresario olivícola. A propósito, no podía dejar de preguntarle sobre si el TLC con Perú estaría haciendo ver negra la situación de mercado a las Aceitunas de Azapa…
Competir con valor agregado
¿Es tan cierto que el TLC con Perú afectará la producción de aceitunas de Azapa?
El problema de nosotros es de otra naturaleza. Lo que perjudica es el volumen. Cuando uno es chico y no puede crecer, tiene que hacer el producto más interesante. Un plus para competir, porque Perú creció. En los ‘60 mi papá exportaba aceitunas a Perú en barriles. Cuando Perú vio que podía hacer lo mismo y el negocio era bueno, cultivaron lo mismo de aquí, con varitas, protegiendo lo suyo de lo de Chile. Así empezaron a crecer y hoy tiene 40 veces lo que nosotros y con eso no se puede competir: tiene costos más bajos, además de subsidios y hay mano de obra más barata. Esta es la historia resumida.
Entonces, ¿qué se puede hacer con la aceituna, un producto símbolo de la zona?
En el valle, todos los olivos están negros por una plaga que no los mata, pero no le permite dar frutos. La mitad del valle ya no da aceitunas. Junto con eso, el mundo cambió. Todo funciona con volúmenes. Ahora se trabaja con una aceituna chiquita y nosotros tenemos la mitad o menos de la producción de hace 30 años atrás. Hay que buscar otro destino: los envasados de vidrio, procesados de otra manera. La Familia Lombardi ha ido incorporando estas cosas.
Pasa que el agricultor tradicional murió, no sólo en Arica, sino a nivel nacional. Él ya no tiene posibilidades de vida, a todo reventar ser un agricultor de subsistencia. Hoy día hay que ser un empresario-agricultor, porque si no maneja un sistema de costos no va a llegar a ninguna parte. Eso de “le pongo el precio al kilo, porque así está en la feria” es un cálculo obsoleto, y en Azapa sigue siendo mayoritariamente así, por lo que se hace bastante difícil salir adelante. Para dar valor agregado, hay que ser empresario, sino no se puede negociar. Todo lo chiquitito ya no tiene posibilidades. Para mejorar hay que hacer muchas cosas. Existen problemas de educación, culturales, económicas y de técnica. Hay que cambiar el modelo, pero cambiarlo es complicado, hay que unirse, porque cada uno por su cuenta no va ha lograr mucho.
Haciendo productiva la Nueva Región
En cuanto a Provegar, ¿ve que puede mejorar el panorama con Arica Parinacota Región?
La verdad de las cosas es que Arica Parinacota Región es un aspecto de organización de tipo política de Estado. Ahora, que la cosa para que salga adelante depende exclusivamente de nosotros. Personalmente, creo que si los ariqueños no se ponen las pilas, esto no llega a ninguna parte. Hay que aprovechar todas estas ventajas que se pueden producir, que no están, hay que formarlas, hay que crearlas. Una de las ventajas, es que la administración va a estar acá, por lo que hay que coordinarse con las autoridades, poniéndonos focos. A todos nos interesa salir adelante, pero todos juntos, pero separados no se llegará a ninguna parte. Debe hacer un interés real, concreto, no sólo “conversemos”. Así le agregamos valor a la agricultura de la región. Hay que tener interés por las buenas prácticas agrícolas, hay que incorporarlas. Ocurre que los clientes quieren saber todo, desde dónde sale hasta cómo se procesa el producto (normas por las que vela el SAG, que da un certificado por su cumplimiento). Al cliente no le interesa el precio, sino la calidad, y así se puede cobrar más.
Todos tienen que tener buenas prácticas agrícolas, sino en 5 ó 10 años más los agricultores de la zona no van a poder vender, y no estoy exagerando. Como lo que pasó con el vino en los ’90: hace 10 años se tomaba en chuica o barril, pero desde hace más de 5 años ahora todo es embotellado. En el área agrícola pasará lo mismo, por eso las empresas están exigiendo buenas prácticas. Justamente por eso en las etiquetas de los productos de supermercados se hacen las referencias al origen y tipo de riego de las verduras, por ejemplo.
De tú a tú
Provegar, cuyos productos llevan el nombre de "Trébol Rojo", administrado por Miloslav, lleva 2 años con este proyecto que partió en cero peso, pero que velando por la calidad, logró certificaciones del Servicio de Salud, el SAG y CORFO, estamento que no subsidia cualquier cosa. Hoy Provegar surte verduras de calidad de la a, a la z: desde acelga a zanahorias, trabajando con agricultores de los valles de Azapa y Lluta. En definitiva, ha tenido éxito en base a ventajas geográficas, productivas y climáticas que supo trabajar y ponerle valor a través de garantizar vegetales sin preservantes, crudos cortados en general en bastones, cubos o rodajas de diferentes medidas. Y todo por observar la tendencia mundial: alimentación sana, y ya.
Desde su visión, ¿qué puede compartir de su experiencia para todos aquellos que quieren emprender en la ciudad?
Ser perseverante. Hay que ponernos las pilas con la nueva región, no estar llorando ni peleando, que el alcalde allá, que el diputado acá, eso no tiene destino. Lo que tiene sentido, sea del color político que sea, es ponerse las pilas y trabajar. Hay que ser más simple. Acá hay cosas por hacer. Los jóvenes tienen que ponerse a pensar. Antes la ideas llegaban del cielo, hoy pueden revisar Internet y ver proyectos que pueden hacerse o adaptarse acá. Por ejemplo, a mi me gustan los champiñones, y averiguando sobre sus variedades concluí que se pueden cultivar acá. Es fácil hacerlo, la estructura es barata. Ventajas: en el sur se hace una temporada, acá se pueden sacar 3. La desventaja: hay que traer el sustrato del sur. Ventaja: los desechos del choclo (que acá se bota) como abono otorgan alto contenido de azúcar al champiñón, el cual sale con mejor sabor y característica. Ves, eso se puede hacer. Costo energía, bajo. Está todo en Internet.
Hay que estar atento…
No estar atento, sino buscar la oportunidad. Hay que generar riqueza, es la labor de los jóvenes. ¿Buscar qué? cualquier cosa. Veamos características. Esta idea (Vegetales Frescos Pre Cortados) la encontré en Internet. Investigué y adapté, viendo la competencia. Hay que tener imaginación y buscar alternativas. De ahí puede salir algún proyecto. Hay que moverse bien.
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